MIDNIGHT DELIVERY

Mindes inició programa de reparto gratuitode alimentos en zonas más pobres de Lima

Ayer, por la madrugada se inició una experiencia piloto de lo que será el nuevo programa de reparto gratuito de alimentos en las zonas más pobres de Lima, con la distribución de 6,500 bolsas con productos de primera necesidad, informó la ministra de la Mujer y Desarrollo Social, Susana Pinilla. La ministra señaló que este primer ensayo servirá para realizar un planeamiento detallado con la participación del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) en conglomerados de viviendas de familias de menores recursos.«Si la vivienda se encuentra en el conglomerado correspondiente a las que tienen necesidades básicas insatisfechas, recibirá la ayuda alimentaria. Por eso, para evitar problemas en el vecindario, se entrega a todas las familias agrupadas en el conglomerado», expresó.Indicó que el objetivo es distribuir cien mil bolsas de alimentos a las familias más pobres del país.Pinilla afirmó que si bien en esta primera entrega se distribuyó 6,500 bolsas de alimentos, pero se buscará realizar diez operativos de 10 mil bolsas cada uno o cinco operativos de 20 mil bolsas cada uno.«La selección de las familias beneficiadas se hace partiendo de las necesidades básicas insatisfechas. Para esto se necesita una logística muy especial. En primer lugar, hemos hecho un trabajo de planeamiento muy detallado con la participación del INEI y del Sistema de Información del Ministerio de Economía y Finanzas», subrayó.Refirió que la experiencia piloto de ayer se desarrolló en las zonas de Lomas de Carabayllo (cono norte) y en Villa El Salvador (cono sur).Aseguró que este esfuerzo, que empezará en Lima Metropolitana, se aplicará también en otras ciudades del país.La titular del Mimdes remarcó que para la distribución de las bolsas de alimentos su portafolio suscribió un convenio con el Ejército, que –dijo– tiene la capacidad logística para realizar un trabajo combinado con el Programa Nacional de Asistencia Alimentaria (Pronaa).Señaló que la participación del Ejército Peruano en esta tarea de distribución obedece a que ninguna institución cuenta con la capacidad logística y de personal para llegar a las cien mil familias.Respecto a las horas de entrega –que en este caso ocurrió de madrugada– Pinilla indicó que este piloto está probando las horas más adecuadas y en vista que se trata de un reparto casa por casa.«En anteriores experiencias se llamaba a la población y está hacía una cola en la plaza más visible de la localidad y se le entregaba la bolsa con alimentos. Ahí no tenemos claridad de que estamos llegando en verdad a los más pobres, dado que muchas veces ingresa a la cola cualquier persona. Por eso es que se ha determinado que la entrega sea casa por casa», dijo.Agregó que otra razón para este tipo de entrega es que la población de escasos recursos acostumbra salir muy temprano a trabajar.«Si el reparto lo hiciéramos al mediodía, no estaría el dueño de casa y la ayuda no llegaría a los más necesitados. Por eso es que en esta experiencia piloto se ha previsto la entrega entre las tres y cuatro de la madrugada, dado que a las cinco ya salen a trabajar», anotó.

Extraña forma de tratar de ayudar a los más necesitados. Además -prioritariamente hablando- hay una cantidad inmensa de personas que han sido afectadas a niveles de indigencia y hambre por distintos desastres naturales en todo el país. Siempre estaremos de acuerdo con la asistencia social del estado hacia quienes pasen por la terrible dificultad de sobrevivir en estos tiempos. Queremos simplemente que se haga con orden y respetando el carácter de urgencia que se tenga en cada caso particular y específico. También es necesario que se cumpla escrupulosamente con los mecanismos de fiscalización y control. Fueron demasiados los casos de aprovechamiento ganancioso que nos tuvimos que soplar durante los primeros días que siguieron a los sismos del año pasado. Realmente fue una verguenza.

Y que -por todos los cielos- no prime ningún criterio de partidarismo o clientelismo político. Como nación necesitamos que las cosas no se hagan entre gallos y medianoche por mas efectivo que pretenda ser este reparto nocturno de alimentos.