LA PARIS QUE TODOS QUIEREN

Paris Hilton muy interesada en cambiar su imagen de frívola

Dijo que quiere "dejar huella en el mundo" y no ser recordada como una chica alocada. Visitará Ruanda para llamar la atención del planeta sobre la extrema pobreza.
La 'socialité' Paris Hilton quiere dejar atrás los escándalos que rodearon su vida hasta hace poco, y que incluso la hicieron pasar 23 días tras las rejas por manejar su auto ebria. Ahora, la heredera del imperio hotelero Hilton quiere y busca construirse una nueva imagen.
"Hay mucha gente mala en Los Angeles. Antes, mi vida era divertirme, ir a fiestas. Era una fantasía (...) Pero cuando tuve tiempo de reflexionar, me sentí vacía. Quiero dejar una huella en el mundo", expreso la excéntrica Hilton a la más reciente edición de la revista Newsweek.
Y una de sus principales primeras medidas para conseguir lo que tanto busca es dedicarse a realizar bien social entre las personas más necesitadas del mundo. Por eso, el próximo mes, viajará a Ruanda para llamar la atención del mundo sobre la extrema pobreza y el sinfín de necesidades que tiene ese país africano.
"Tengo miedo, sí. He escuchado que es realmente peligroso (...) Nunca he hecho un viaje como este", añadió.
La sensual e inefable Paris visitará África acompañada por una organización benéfica dedicada a brindar apoyo a los niños. Así, Hilton visitará por cinco días, al lado de 'Playing for Good', varias escuelas y clínicas en lo que significa su primera misión carititativa. Incluso, indicó que la visita se grabará.
"Me encanta que todo se documente (...) Esta grabación le mostrará a la gente lo que es el día a día para mí, lo duro que trabajo. Hay muchas ideas equivocadas sobre mí", expresó finalmente Paris Hilton".

Las chicas buenas se van al cielo. Las malas, a donde quieran, reza un viejísimo adagio. Paris es una especie de loquita normal y natural de esta civilización del escándalo. Fisicamente, no es gran cosa, es flacona e insípida. Pero gracias a ser la heredera de una cuantiosa fortuna ha trascendido en los medios haciendo unos programas bastantes idiotas. Ahora quiere perder su verdadero encanto: la niña ricacha de las pataletas y de los excesos. La millonaria a la que habría que darle un poco de hard sex para que se amanse. Porque ese es el encanto real que los hombres ven en ella. A muchos les encantaría corregir a la gringuita con unos tas-tas en su albino trasero. Ahora dice que quiere hacer obra, ayudar al mundo (y lanzarle un poco de pan a los pobres de Africa) para su nueva beatificación social. Pierdes el tiempo Paris, a la gente le gustas por tu darkly side, ese que despierta la atención del cucufato, del pacato y del mil rezos. De buena serás rapidamente olvidada, la imagen sepia y amarillenta de la flaca borracha, la del videíto semi-porno, la que estubo en prisión, la que dejo escapar un inocente pezón en una foto,en fin, las secuencias de tu pasado tontito y tormentoso se sobrepondrán a la de señorita preocupada por los pobres del mundo. No insistas -no hagas promesas sobre el bidet- gustas así, rebelde, viciosa, malcriada, pervertida: terrible producto del vacío existencial de la humanidad.