LA MUERTE NOS SIENTA BIEN

Por confusión le aplican autopsia a paciente vivo
Carlos Camejo dijo que los médicos de un hospital de la población de La Victoria desistieron de hacerle una autopsia al notar que sangraba por sus heridas faciales.
En una caótica autopista en Venezuela y con el encargo de enviar dos heridos al hospital, un oficial de tránsito usó planillas equivocadas y desató una confusión sobre una autopsia que nunca se llegó a consumar.
Carlos Camejo, un chofer de 33 años, dijo la semana pasada al diario local El Universal que los médicos de un hospital de la población central de La Victoria desistieron de hacerle una autopsia al notar que sangraba por sus heridas faciales.
Sin embargo, a dos semanas de haber estrellado su moto con un camión detenido en el borde de la autopista regional del centro, Camejo dice no recordar nada de aquel día y el hospital involucrado dice que la intervención nunca ocurrió.
"Yo no me acuerdo de más nada (después del accidente)", dijo Camejo, con heridas visibles en su rostro.
Mientras, testigos aseguran haber escuchado del intento de autopsia pero no pueden precisar indicios de que ocurriera.
Por su parte, el hospital José María Benítez de La Victoria niega la historia al asegurar que no está autorizado para realizar el examen y argumenta que el funcionario de tránsito que atendió el accidente del 6 de septiembre usó una planilla equivocada.
Una fuente de tránsito, que declaró bajo condición de anonimato, confirmó que utilizan dos planillas para referir a víctimas de accidentes a la medicatura forense: una para los muertos y otra para los heridos, pero que ambas son de aspecto muy similar.
"A veces pasa que uno confunde las planillas, a mí me ha pasado", afirmó la fuente que mostró ambos formatos, que diferían en las últimas líneas.
En el hospital afirmaron que al funcionario pudieron habérsele terminado las referencias de heridos.

Esta noticia casi anecdótica sería una clara demostración sobre el verdadero significado de la vida y la muerte. Ambas podrían ser tan solo una simple puerta que atravesamos para el proceso de la expansión de la conciencia. No haya mucha diferencia en el sueño de la humanidad. La muerte le da una extraña expresión de paz en el rostro a quienes logra alcanzar. La vida -como en esta noticia- suele ser sangrante y confusa. Nosotros también confundimos las planillas y como en la película Sexto Sentido podríamos deambular como muertos y creer que estamos vivos. Y tan sólo es un sueño o un juego.