ESQUELETOS EN EL ARMARIO

ES UNA CUESTIÓN DE ACTITUD (*)por Hugo Del Portal

Hace frío. Las mañanas están roneras. Y nuestro ilustre "first citizen" anda ahora tratando de convertirse en una constantinopla de Chopra, Castañeda, Bucay y Victor Vitch. Le ha dado por el tema -maniqueazo- de los optimistas y pesimistas para justificar que -pese a su recontra cacareada- bonanza económica el ánimo del peruano común y silvestre, ciudadano de a pie (y de combi) anda normalmente con la moral del boxeador paquete, es decir por la lona. Porque para distraernos de esta rutina demoledora en donde siempre se hacen presentes las ineficacias y carencias testiculares de un canciller bastante abierto de piernas para sus tratos con el filibustero vecino del sur, dueños de casi el 50% del país y sus riquezas (dejémonos de una vez de hablar del tema utilizando el recurso del chamuyo disimulador) o las limitadas aptitudes profesionales del travesti encargado de la cartera de agricultura (Jacinta Cuculí para los amigos y no te conozco para los agricultores) hay que llamar al enfermero de turno de palacio y pedirle la diaria ayuda de una inyectable dosis de antidepresivo. Claro, cualquier tipo de este medicamento tiene un efecto secundario no comentado en la literatura médica, el priapismo, lo que nos obliga a esconder a las mujeres (sino pregúntenle al ahora amigo de todos, Polay) y hacer que el circo de la cortina de humo cotidiana adquiera una tonalidad del más puro estilo Fellini, así que ya tan solo nos faltan, la gigante y los enanos o los desatados homosexuales del Satiricon. Escoja usted, según sus gustos y con toda la libertad de expresión que le permitan los brocasters.

Pero yo quiero subirme al corzo de la gente positiva (¿o positivista?) y sumarme al pedido de convertirnos en la sede de las Olimpiadas del año 2020. Es más, tengo una lista de propuestas para las ciudades que recibirían a las delegaciones de atletas del mundo y al montón de periodistas que cubren el evento. Están, en primer lugar, Chincha, Pisco e Ica. ¿Qué les parece? Podríamos empezar a reconstruirlas (esta vez de verdad) y de paso como que nos ocupamos de esa pobre gente abandonada y que sufren por la amnesia, indiferencia y estupidez de quienes manejan este Perú, "ejemplo y envidia del mundo por su crecimiento económico espectacular".

También tenemos las ciudades de la sierra sur del país en donde además -con el friaje de todos los años y sin la previsión de todos los años- se podrían realizar también las olimpiadas de invierno. A ver si así, les llega la ayuda.

Hay ciudades de la selva completamente inundadas, destrozadas por las lluvias en donde la gente no tiene ni que comer que gustarían mucho de tener cerquita a los espíritus positivos y aventureros de ciertos turistas palaciegos de los deportes de riesgo como mentir con cierta desenfrenada compulsión.

Tenemos muchas localidades destruidas por la ambición de las compañias mineras en donde el desamparo acompaña a diversas enfermedades mortales, propias de la actividad que desarrollan estas empresas -exoneradas del pago de impuestos por la generosidad de quien regala lo que no es suyo- y que nos averguenzan ante los ojos de un mundo civilizado que pareciera inalcanzable y al cual se desea acceder, rompiendo pistas, imponiendo restricciones de tránsito, enrejando la ciudad y escondiendo la inmundicia debajo de la alfombra.

Hay que hacerles entender a los asesores del demasiado hablante que nos gobierna que las cortinas de humo mas apestosas e insoportables son la que se intentan revender, en una fritanga recalentada de argumentos banales. Peor aún si el país necesita de la atención urgente en zonas indescriptiblemente críticas. ¿Qué esperamos? ¿una protesta popular de gente desesperada ante tanta displicencia del estado? ¿ante la desolación, la barajamos con las Olimpiadas 2020?

Es solo una cuestión de actitud, entender lo que está escrito en el viento. De nada nos va a servir pretender con las estadísticas -que como los bikinis muestran lo que se desea mostrar y esconden lo que se desea esconder- contagiarnos del optimismo latoso que tanto pregona (y con el nos provoca) el gobierno de los cavernícolas locales de turno, que suelen ser los de siempre. Y a los cuales hay que agradecerles la situación actual, que ha sido igualita a la del pasado reciente y antiguo.

Mientras tanto, detrás de las frontera, escondidos entre los buenos negocios, se calculan las rentabilidades futuras de esta inacción y se vislumbra la certera oportunidad de que nos engulla el agujero negro de nuestros propios errores.

Por eso decía, como Fito Páez canta, es sólo una cuestión de actitud, ir con taco aguja en pista de hielo.

(*) Tema del celebre cantautor argentino de su cd: ABRE.

Al encontrame cerrando esta nota, me entero de la aparente desaparición de las Services. Según el analista en temas políticos, economía, historia, y miscelania de café, el Dr Peter Garca, la jugada se debe a la urgente necesidad por aproximarse la fecha de cumplimiento de exigencias para el funcionamiento del TLC.

Cabe acotar que se la han estado jugando (como James Bond) diversos gremios de trabajadores y la prensa progresista que ha sabido estar ahí, en el momento, para cubrir y trasmitir la verdad de las noticias sobre las protestas cotidianas como el diario La Primera, y la valiente corresponsal de la cadena internacional Canal Sur.

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