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"Mi topless no es vulgar”
Un tímido topless realizó Sara Manrique, quien fue la atracción en el debut de la obra “Confesiones de la vagina”, que dirige Alex Otiniano. Pese a que la ex bailarina aún no recupera su peso ideal, pues hace tres meses dio a luz, hizo un buen papel y el público la llenó de aplausos.A pesar de ello, Otiniano se molestó con Manrique porque el semidesnudo se pudo apreciar por unos segundos, pues la esposa de Tenchy Ugaz se tapó sus atributos rápidamente."Los nervios no me traicionaron…Mi topless no es vulgar, está bien cuidado. Es profesional y hubo muchos ensayos antes de presentarlo al público", dijo en su defensa Sara tras acabar su participación en la puesta en escena.
Un tímido topless realizó Sara Manrique, quien fue la atracción en el debut de la obra “Confesiones de la vagina”, que dirige Alex Otiniano. Pese a que la ex bailarina aún no recupera su peso ideal, pues hace tres meses dio a luz, hizo un buen papel y el público la llenó de aplausos.A pesar de ello, Otiniano se molestó con Manrique porque el semidesnudo se pudo apreciar por unos segundos, pues la esposa de Tenchy Ugaz se tapó sus atributos rápidamente."Los nervios no me traicionaron…Mi topless no es vulgar, está bien cuidado. Es profesional y hubo muchos ensayos antes de presentarlo al público", dijo en su defensa Sara tras acabar su participación en la puesta en escena.
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Cuarta parte es la peor de toda la saga
La película “Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal”, aún no se estrena, pero ya los críticos la han calificado como la peor película de la saga que protagoniza Harrison Ford.Los especialistas que ya vieron la película consideran que tiene una trama predecible y efectos especiales cursis, falta de tensión, una jungla que parece de plástico. Una de las críticas que se leen en Internet castiga al film llamándolo "la película de Indiana que usted temía". El texto que se puede leer en el sitio de cine aintitcoolnews.com asegura que la cinta tiene una trama predecible y efectos especiales cursis, falta de tensión, una jungla que parece de plástico y chistes gastados sobre la avanzada edad de Harrison Ford.Las malas críticas no tendrán mucha influencia en la taquilla, ni parecen importarle al creador de la idea, George Lucas, quien resta importancia a las críticas, pues está seguro que a los fans les gustará el filme.
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Basta que una actriz con aspiraciones decida exponer al público (culto de jeropas seguidores de las obras de Otiniano) sus glándulas mamarias (porque tenemos entendido que la Sra Sarita acaba hace unos meses de ser madre) para que con ese marketing mamarachento -típico de productor tercermundista deseoso de promoción- nos hagan saber que la dama en cuestión nos muestra sus lolas con decencia, que en estos casos es lo que menos importa. Los asistentes al teatro Astros lo único que quieren es pegarse una ganadita bien voyeur con estas artistas de la fauna nacional que alimentan la ilusión de una vasta cadena de onanistas. Así que ya saben, ¿Quiéren ver los pechos de Sara Manrique de Ugaz? . Veinte mangos la entrada y no es vulgar.
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Dicen que ya fue. Que no va a ser. Que Harrison esta recontratío y que de tanto empinar el codo (porque le gusta su whisky) se ha puesto igualito a su abuelito. Todos son simples comentarios. Esperemos el estreno en cines este 22, o la copia pirata el 21, a ver si nos pueden regalar algo inteligente en que pensar.
Sino, a ver si nos prestan el látigo de uso cotiadiano de Indiana Jones para corregir a tanto compañero golosón como los que ahora inundan la administración pública.
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