Evo Morales invitó a salir de Bolivia al embajador de EE.UU.
El mandatario boliviano aseguró que "no permitirá que los virreyes" (alusión al embajador estadounidense) intervengan en la política del país altiplánico.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo hoy que "si quieren retirarse es problema de cada país", abriendo con ello las puertas a la salida de la representación diplomática de Estados Unidos del país andino.
El inesperado anuncio lo hizo hoy en conferencia de prensa en el Palacio Quemado de La Paz, donde reiteró que "Bolivia no va a romper relaciones con nadie (...) Si (Estados Unidos) quieren retirarse es problema de cada país".
Agregó que su gobierno no "permitirá virreyes (alusión al embajador de Estados Unidos) que cambian ministros; virreyes que observan y cuestionan. Eso se acabó. El que quiera venir aquí, bienvenido. No por ser un país pequeño van a imponer sus intereses, eso ha terminado".
Morales volvió hoy a felicitar a los productores de la hoja de coca en el trópico de Cochabamba, en el centro de Bolivia, por la expulsión de esa región de la Agencia de Cooperación de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Explicó que la ayuda estadounidense en Villa Tunari no supera los 80.000 dólares por año y que en otras regiones USAID aporta de 3.000 a 50.000 dólares.
"Otro día explicaré en detalle este financiamiento. Nos ayudan pero a cambio tienen control político", agregó.
El retiro de USAID -según publica hoy el diario "La Razón" de La Paz- le puede costar al país andino la ayuda efectiva en el manejo forestal de los parques nacionales Isiboro Sécure y Carrasco, que están en permanente riesgo de convertirse en zonas destinadas al cultivo de la hoja de coca.
También se corre el riesgo de perder la cooperación en el manejo de cuencas, el desarrollo de la agroforestería y otras actividades que estaban en ejecución con una veintena de instituciones y en coordinación con la Universidad Mayor de San Simón.
El gobierno de Estados Unidos recomendó a sus ciudadanos retirarse del trópico de Cochabamba por falta de garantías desde una marcha de los habitantes de El Alto, vecina ciudad de La Paz, el 9 de junio, cuando rodearon la sede diplomática que está en el barrio paceño de San Jorge, a escasa distancia de la residencial presidencial y de un cuartel militar.
Los manifestantes protestaban porque Estados Unidos concedió asilo político al ex ministro de Defensa Carlos Sánchez Berzaín, uno de los implicados de la muerte de 67 personas y unos 400 heridos en la llamada "guerra del gas" de octubre de 2003 que provocó la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada.
No nos extraña en lo mas mínimo que le cursen una invitación tan particular al embajador norteamericano en Bolivia. Su intervencionismo es tan burdo, tan evidente y tan obvio que tiene el sello de MADE IN USA y huele al bourbon de Kentucky que usaba cierto dipsómano dizque recuperado. Había que hacerles el alto. En cuanto a Evo, decir que se le salió el indio puede sonar a joda y lo que le queda de gobierno no auspicia un futuro muy estable porque ha logrado extrañamente hacer converger las jugarretas de los gringos, las ambiciones del cacicazgo local, la voracidad vecina, la permanente intromisión de Chavez, los complejos raciales, su pésima gestión de gobierno, varios desfases técnico/tácticos y el hartazgo del pueblo del ande que anda mas podrido que nunca.
-------------------------------------------------------
No hay comentarios:
Publicar un comentario
HABLA JUGADOR