Lindsay Lohan -otra de las loquitas de Hollywood- famosa por sus escandálos (y su falta de cultura etílica) se desnuda como la inolvidable e insuperable Marilyn Monroe en una sesion de fotos para la revista New York Magazine, correspondiente a marzo de este año. Luce tan deliciosa como en sus veniales pecados. Por eso se le perdona tanta boludez majadera. Las bellezas así son inimputables.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
HABLA JUGADOR